Letra:Pedro Conde - Música:Pedro Conde
Los tonos más menores ya no sirven para hablar de mi ciudad. La situación es que el momento que vivimos no permite hablar. Si nueve pisos caen sobre tu cabeza, no podés llorar. Hoy la tristeza te la sirven en bandeja a la hora de comer. Con la cabeza de tus hijos a la brasa y sangre bien frappé. De postre helados infectados con la rabia de Pasteur. En un casino de Retiro, con smoking talla Hezbollah. Y coronando al cero, los porteños corren bolas de humedad. El sida, el terrorismo y los banqueros, juntos, juegan al Black-jack. La bronca te devora la paciencia en el instante de pensar. Y si pensás, la bronca crece, porque vos también querés matar. Y así las broncas, todos contra todos vuelven a empezar. Y así las broncas, todos contra todos vuelven a empezar. (El día de la explosión de la AMIA)
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